El presidente de Chile, Gabriel Boric, suspendió de manera formal la participación de su país en el Foro para el Progreso de América del Sur (Prosur), creado en 2019 por el mandatario colombiano, Iván Duque, y su par chileno, Sebastián Piñera, en sustitución de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).
En una comunicación enviada el pasado viernes, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile expresa su decisión a la Secretaría Ejecutiva de la alianza, integrada exclusivamente por gobiernos de la derecha latinoamericana caracterizados en los últimos años por su presión a la administración de Nicolás Maduro y a las embajadas de ese país en la región.
La información fue confirmada a CNN en las últimas horas por la canciller chilena, Antonia Urrejola, quien recordó que, durante su campaña y el balotaje, el actual presidente había manifestado que no se sentía identificado con Prosur como un mecanismo de integración regional y que buscaban mantenerse en organismos regionales donde su miembros no pensaran ideológicamente de la misma manera.
En diciembre pasado, Boric dijo que no acompañaría a Piñera a una cumbre de Prosur en Colombia porque era un agenda propia de su predecesor. «Es necesario que América Latina vuelva a tener una voz en el mundo», dijo entonces el mandatario, remarcando que organismos regionales «como Prosur, Unasur o el Grupo de Lima, no sirven para unir ni para avanzar en la integración».
El citado organismo regional aglutina a gobiernos de la derecha que buscaban una alternativa a la Unasur, creada en 2008 por los presidentes progresistas e izquierdistas de la región.
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