En un esfuerzo por frenar la creciente inflación en los Estados Unidos, la Reserva Federal, dispuso endurecimiento monetario con un un incremento de 25 puntos básicos de las tasas de interés, hasta el rango del 0,25-0,50 %.
La medida que es la por primera en más de tres años para restringir la inflación significa que todas las formas de prestación, desde los préstamos para la compra de auto hasta las hipotecas y tarifas de tarjetas de crédito, van a encarecerse.