Bogotá, 18 jun (Prensa Latina) La última semana, que concluye hoy, previa al balotaje en Colombia, transcurrió entre la reflexión de los votantes y la confirmación del talante moral de los dos candidatos contendientes.

«Mañana se escoge entre el acuerdo nacional convocado por un Gustavo Petro conciliador y maduro, y el delito en cabeza del disparate y la deshonra pública. Petro, hoy, esperanza y paz duradera. Rodolfo Hernández, prolongación del odio, la confrontación, la ignorancia y la muerte», afirmó el político Álvaro Leyva.

El exministro y otrora congresista del Partido Conservador se refirió de esa forma a las dos cartas que tiene el electorado con las cuales se jugará el destino de Colombia en las urnas este domingo.

Por un lado, esta semana Petro continuó su trabajo de convencimiento cara a cara con personas del pueblo como obreros, campesinos, entre otros, con los cuales intercambió acerca de sus problemáticas y posibles soluciones, incluso pernoctó en sus propias viviendas y estuvo en sus áreas de trabajo.

Asimismo, ayer, el candidato presidencial del Pacto Histórico convocó al primer encuentro para sentar las bases de lo que ha denominado el Gran Acuerdo Nacional en Colombia.

Explicó que se trata de un diálogo abierto y plural en pos de consolidar una nación más unida que pueda salir, finalmente, de la polarización a partir del lunes 20 de junio. Al decir de Leyva, «la convocatoria que hizo Petro a un gran acuerdo nacional es de mucha trascendencia, es luminosa, esto porque se traduce en su deseo de gobernar por consenso a la manera de los pactos de la Moncloa en España en 1977 que reconstruyeron al país tras la muerte de (Francisco) Franco, verdugo de la democracia», manifestó.

En tanto, esta semana el Tribunal Superior de Bogotá falló a favor de una tutela presentada para que los candidatos presidenciales, Rodolfo Hernández y Gustavo Petro, participaran en un debate público a más tardar el pasado jueves.

Aunque Petro reiteró su disposición a debatir en los medios públicos con su contrincante, Hernández aceptó en un primer momento, pero bajo sus condiciones, las cuales incluían que el encuentro fuera moderado por tres periodistas que él mismo escogió (uribistas) y también impuso los temas.

«Usted dice que acepta el debate. No es verdad. Usted se burla del debate, de la Justicia, de los medios de comunicación y de los colombianos al querer imponer unas condiciones», enfatizó el candidato del Pacto Histórico.

Añadió en un comunicado que el desprecio de Hernández a las más mínimas normas democráticas es total y revelador.

Hernández, quien ha manejado su campaña electoral desde las redes, dijo que no participaría en ningún debate público con miras al balotaje de mañana domingo, pero aceptó tras el fallo.

Sin embargo, el «ingeniero», caracterizado por un verbo descortés, soez, vulgar, agresivo y hasta carente de contenidos, probablemente incapacitado para debatir, según ha demostrado todo este tiempo, a última declinó participar en el debate y prácticamente culpó a Petro de su inasistencia.

Este domingo, un total de 39 millones dos mil 239 colombianos podrán votar en segunda vuelta electoral para escoger al próximo presidente del país, entre Petro, líder de la coalición de izquierda Pacto Histórico, y Hernández, un empresario de la Liga de Gobernantes Anticorrupción (derecha).

oda/otf

Por Radaccion

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