Por Ramón Mercedes
NUEVA YORK.- La fiscalía de Long Island, donde residen miles de dominicanos y otras etnias hispanas, acusó a Remon Gibson, de 43 años, de tener suficiente droga en su casa para poder matar a 3,5 millones de personas.
Fue presentado el pasado fin de semana ante el tribunal del condado de Suffolk y acusado de nueve cargos de tráfico y posesión de drogas, además, poner en peligro a un menor.
El fiscal Ray Tierney dijo que la cantidad de droga recuperada de Gibson era “asombrosa”, suficiente fentanilo para matar a todos los hombres, mujeres y niños de Long Island.
Los fiscales registraron la casa de Gibson y confiscaron 15 libras de fentanilo, 18 de cocaína y media libra de xilazina de una vivienda en Bellport, Long Island, distante a 80 kilómetros del condado de Manhattan.
También encontraron 80.000 dólares en efectivo y equipos de producción de droga, incluido un libro de contabilidad y una prensa de kilo con la frase «COVID-19». Pagó una fianza de 800.000 dólares y esperará el juicio fuera de la cárcel.
Long Island es una extensa isla con una densa población en el sureste del estado de NY y se extiende al Este desde NYC. Los grupos étnicos: 54,7% blancos, 20,5% hispanos o latinos de cualquier raza, 20,4% negros, 12,3% asiáticos, 8,8% de otras razas, 3,2% de dos o más razas, 0,49% nativos americanos y 0,05% isleños del Pacífico.