Estrellas se medirán al Licey por la Corona del campeonato.
Las Estrellas Orientales vuelven a la serie final del béisbol dominicano luego de vencer a las Águilas Cibaeñas tres carreras por dos, gracias a tres jonrones de los verdes, dos de ellos en el primer episodio, en un partido disputado este miércoles en el Estadio Cibao.
El equipo verde vuelve por segunda vez consecutiva a la serie final de la pelota dominicana, hazaña que repiten por primera vez desde las campañas 1986-87 y 1987-88, cuando enfrentaron a las Águilas y a los Leones del Escogido, respectivamente.
Gustavo Núñez y Jeimer Candelario dispararon un bambinazo cada uno en el primer episodio. El tercer jonrón salió del bate de Junior Lake, los tres cuadrangulares fueron contra el zurdo estelar Roenis Elías, quien no presentó la efectividad acostumbrada en el encuentro, en su retorno a juego después de compromisos personales.
Edwin Uceta lanzó cinco entradas completas de cuatro hits, un boleto y tres ponches para llevarse la victoria y Ronel Blanco logró el salvamento al tirar una entrada y dos tercios de un hit y un boleto. En el noveno dio una base por bolas, cedida a Melky Cabrera, sustituido luego por Yefri Pérez. Blanco dominó a Johan Camargo con elevado al jardín derecho para definir la victoria.
Licey supera a Gigantes.
Mel Rojas Jr. disparó un jonrón y los Tigres del Licey blanquearon ocho carreras por cero a los Gigantes del Cibao, para avanzar a la serie final de la pelota invernal dominicana, tras su triunfo este miércoles en el Estadio Quisqueya Juan Marichal, en lo que resultó un juego errático del equipo cibaeño.
El Licey (10-6) se medirá a las Estrellas Orientales (10-6), luego que el conjunto verde eliminara más temprano a las Águilas Cibaeñas, que junto a los Gigantes se convirtieron en los dos conjuntos eliminados de esta semifinal todos contra todos.
Será otra visita de los azules a la final y su primera desde 2019-20 cuando cayeron eliminados por los Toros del Este 5-3.
Fue un partido deslucido para la defensa de los Gigantes, que cometieron siete errores, casi uno por carrera y de las ocho solo una fue limpia. Lidom