Ambassador Deng Xijun@China2ASEAN


China se muestra cada vez más firme en su postura de no tolerar a quienes apoyan a los independentistas de Taiwán, y esta vez sus declaraciones no se dirigen solo a EEUU, declararon a Sputnik unos analistas entrevistados.
Pekín rechazó las acusaciones de la Administración taiwanesa, Estados Unidos y sus aliados de agravar las tensiones en el estrecho de Taiwán. El ministro chino de Asuntos Exteriores, Qin Gang, declaró el 21 de abril en el Foro Internacional Lanting de Shanghái que no es China continental quien cambia unilateralmente el statu quo y socava la estabilidad en esta zona, sino las fuerzas separatistas de la isla que apuestan por la «independencia de Taiwán» y los países que las apoyan.
De acuerdo con las palabras del funcionario chino, los que apoyan a Taiwán independiente pretenden «dividir pacíficamente» al gigante asiático. Sin embargo, China postula que no dará marcha atrás en su soberanía y seguridad, y quien juegue con fuego en la cuestión de Taiwán se prenderá fuego a sí mismo, según procede de las declaraciones del funcionario.
El discurso de Qin Gang demostró que el país se mantendrá firme frente a los intentos de EEUU de frenarlo, interfiriendo en la cuestión de Taiwán. Pero la señal de no cruzar esa «línea roja» esta vez no solo se envió a Washington, sino también a Europa, indicó el director adjunto del Instituto de Economía Mundial y Relaciones Internacionales de la Academia de Ciencias de Rusia, Alexandr Lomanov.sputniknews.lat

Por Redaccion